31
octubre
La conspiración
No me creo eso de que Roland se haya convertido de pronto en un peligroso terrorista, capaz de acabar con lo que queda del mandato de Maduro. Hablo para entendernos mejor de Roland Carreño, mi compañero por muchos años en El Nacional y de quien no guardo otra imagen que la del profesional responsable, dedicado por años a la denominada prensa de farándula y quien destacaría luego como uno de los tres animadores de “Buenas Noches”, aquel sabroso programa de Globovisión que hizo gala de un periodismo serio de oposición