Sueños mecánicos: la novela de la venezolana Valeria Marcon que busca mecenas
Sueños mecánicos es una novela de ficción especulativa que ahonda en la esencia de la naturaleza humana y, especialmente, en si hay que nacer hombre para disfrutar o padecer eso que venimos a llamar humanidad. Su autora, la periodista venezolana Valeria Marcon, ha arrancado una campaña de crowdfunding para hacerla realidad.
Faca y Hamlet 202 son los protagonistas de Sueños Mecánicos, dos cíborgs mercenarios y cazadores de recompensas, ellos y sus amigos de la infancia son mutantes que una vez fueron humanos. Juntos buscan La Clave para recuperar la humanidad perdida, restaurar el equilibrio y sanar la Tierra tras la devastación, ocasionada por la guerra entre terrícolas y alienígenas en el año 2125.
El destino les pone en el camino para encontrar La Clave, pero tendrán que afrontar grandes peligros y descubrir que no todos son quienes dicen ser: el amor, la lealtad y la amistad sufrirán duras pruebas que les harán dudar hasta de sus propios sentimientos.
¿Cómo ayudar a los ciborgs y cuáles son las ventajas?
Sueños Mecánicos es una novela de ciencia ficción que aún no ha sido publicada. Su autora está convencida de que a los cíborgs les gustaría mucho comenzar sus aventuras y también al resto de sus compañeros, quienes andan desperdigados por un mundo apocalíptico. La única esperanza que tienen es que les ayuden a cobrar vida a través de la publicación del libro.
Para que este proyecto sea una realidad, Faca, Hamlet 202 y sus compañeros piden que les apoyen en una campaña de crowdfunding. Fundamentalmente, al participar en esta campaña, los mecenas estarán apoyando y contribuyendo de primera mano a que este libro pueda imprimirse y publicarse, para sacar adelante la primera edición, que después saldría a la venta.
Al ser un crowdfunding del TODO O NADA (solo se obtiene lo recaudado si se cumple el 100% del objetivo fijado, es decir, 50 mecenas) cada apoyo es fundamental.
Las recompensas
Junto con el libro, los mecenas obtendrán unos regalos extras, dependiendo de tu contribución. La Editorial Tandaia es la encargada de hacer posible esta campaña y ella ofrece unas recompensas.
Para comenzar el proyecto el objetivo es alcanzar 920,00 €. Ésta es la cantidad que se recaudaría si 50 mecenas, cada uno, se hiciesen con un ejemplar de la primera edición (teniendo acceso a las galeradas de la edición, recibiendo un ejemplar semanas antes de la salida de la obra al mercado y si aportas un poco más, podrás ver tu nombre en los agradecimientos).
La autora, por su parte, ofrece a las tres primeras personas que colaboren con la campaña una preciosa taza con la imagen de la portada y el nombre de la persona. Las tres primeras personas que contribuyan en la segunda categoría de recompensas de ejemplar y galeradas (ver el enlace) se llevarán una camiseta con la imagen de la portada. Y, por último, las tres primeras personas que colaboren en la categoría de recompensa PREMIUN tendrán un hermoso poster tamaño Din A3 con la imagen autografiada del autor, Luis Serrano.
¿Por qué ayudar a los cíborgs?
No hay nada más impresionante que ver a una máquina que actúa como un ser humano. O al menos eso fue lo que pensó la autora cuando se topó con Wall-E, que recogía la basura de un planeta Tierra abandonado debido a la contaminación. Y no pudo dejar de admirar cómo se emocionaba con cada objeto que descubría dentro de las montañas de basura. ¡Era algo tan humano! Entonces se dijo a sí misma, "recuerda una máquina programada para limpiar". Aunque Wall-E tenía algo que lo hacía diferente: sentimientos y personalidad propios.
¿Hasta qué punto las máquinas pueden tener emociones, conciencia o recuerdos? Repasó mentalmente en la memoria de su disco duro y le vinieron las imágenes de Terminator, de Sonny, de la Mayor Kusanagi… Todos tienen algo en común y al mismo tiempo son diferentes.
Los organismos cibernéticos se componen de material orgánico y de dispositivos electrónicos, los robots son máquinas que imitan el comportamiento humano y los androides son máquinas humanoides. Breve y simple. ¿En qué se parecen? Están hechos por el hombre, quien busca perpetuarse en la eternidad y necesita sentir que es un Dios creador.
"La ciencia ficción es un género que siempre me ha fascinado. Cualquier cosa es posible y hace pensar en que, en un futuro no muy lejano, todo lo imaginado por el ser humano puede ser real".
Julio Verne, Isaac Asimov y muchos otros fueron visionarios. Y Valeria Marcón, humildemente, quiere rendir tributo a este género literario y a todas aquellas personas que aman las historias de posibles futuros: hecatombes, evolución del género humano en mutantes, entidades virtuales o artificiales, vida alienígena, escenarios apocalípticos, etc.
¿Cómo surgió Sueños mecánicos?
La historia surgió gracias al encuentro de un grupo de amigos que vivieron una aventura singular, basada en un juego de rol. Sin ellos, Faca no hubiera existido.
"Sin ellos yo no hubiese sido Faca y no habría sabido lo que es ponerse en la piel de una cíborg audaz y guerrera. Ahora, los amigos vuelven a reunirse para vivir sus hazañas, como lo hicieron en aquel lejano día en el que nacieron los personajes".
Quienes deseen leer un pequeño fragmento de la obra pueden hacerlo en este enlace entrar en este enlace. "Sé que son tiempos difíciles, yo también los sufro, pero si esto te ha llegado al alma, apoya o difunde esta campaña en tus redes sociales para alcanzar la meta y que pueda ver publicada Sueños mecánicos. Gracias por tu colaboración" apunta la autora.